No hay lugar más variado que la cafetería de la Facultad de Ciencias, aquí puedes encontrar de todo. Por ejemplo, aquella mesa, la de la esquina. Son estudiantes de primero, novatos hablando a gritos de la última juerga que se corrieron. Un poco a su derecha, ¿ves a esas dos mujeres? La de la túnica y la de la bata, ¿las ves ahora? Son dos profesoras, aunque no lo parezcan, la primera de Desarrollo Sostenible y la otra de Química Orgánica. Ambas son dos fijas de la cafetería, de las protestas contra el rector y de las juergas de los novatos. Sus compañeros de departamento no las aprecian mucho, pero una es hermana de no se qué amigo del decano, así que no creo que las echen a corto plazo.
¿Te has fijado en el tipo que hay detrás de nosotros, el de gafas de pasta y pelo descuidado? Profesor también, Física de Partículas. ¿Ves su café? Lleva más coñac que otra cosa; acaba de separarse de su tercera esposa, y creo que no tardará mucho en encontrar a la cuarta. ¡Vaya, mira quién acaba de llegar! La tuna en persona; no te los quedes mirando si no quieres que aparezcan esta madrugada bajo tu balcón en busca de un trago y un beso. ¿Perdón? Sí, tienen mal aspecto, peor que de costumbre. Seguro que anoche anduvieron de ronda, y seguro que visitaron el piso de aquella rubita de ojos azules. Mona, ¿eh? Quería ser enfermera, pero no le daba la nota y acabó en Biología, afortunadamente. No querrías que alguien como ella se ocupara de tus heridas o vacunara a tus hijos, aunque tampoco creo que hubiera podido acabar la carrera. La que está a su lado, la chica de gafas, es su compañera de piso. También es la encargada de la copistería y tiene muy mal genio. La verdad es que está celosa de su amiga, porque todos los chicos se fijan en ella, y claro, lo paga con los novatos que quieren fotocopias.
¿Esos aplausos? Ah, bueno, sí, es el mago, un chaval de Matemáticas que le gusta hacer trucos con una baraja; no se le da mal del todo. También de Matemáticas se supone que son aquellos de allá, los que están jugando al mus. Y digo se suponen porque no entran a clase ni por equivocación, todo lo contrario que aquellos otros, los de la esquina. Esos tíos se pasan aquí la vida, por la mañana en clase y por la tarde jugando a rol por los pasillos. Le dan un poco a todo, Magic, Vampiro, Warhammer,… Y en la esquina opuesta tenemos a los rastas de Biología, que no tienen nada que ver con la rubia de antes. Ideólogos para unos, perro flautas para el resto, lo que es seguro es que armarán jaleo, tan seguro como que no conseguirán nada, pero ahí siguen.
Todos distintos, todos diferentes y eso los hace iguales. Sus rarezas los hacen especiales, pero como todos tienen rarezas, todos son especiales, así que, en el fondo, todos son iguales, igual de aburridos quiero decir. ¿Cómo? ¿Mis rarezas? Eres demasiado curiosa, ¿sabes? Es una larga historia, ¿seguro que quieres oírla?
sábado, 11 de septiembre de 2010
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